Se han estudiado diferentes cremas y son tan buenas como cubrir pezón y areola con unas gotas de tu leche y dejar secar al aire. La leche materna tiene defensas, factores de crecimiento que sanan heridas y antiinflamatorios.
El inicio de la lactancia dentro de la primera hora de nacer y un buen acople previenen las grietas.
Si hay grietas, revisar el acople, es decir que la areola (parte pigmentada de la mama) y que el pezón apunte hacia el paladar y esté muy dentro de la boca del niño , de manera que no lo muerda ni aplaste durante la mamada.
No usar jabón.
Las pezoneras debieran ser en casos muy especiales, indicados por un experto, no para prevenir grietas de un pezón normal. No hay evidencia científica de que la luz ayude a curar las grietas